CÓMO PREVENIR EL BULLING EN LAS AULAS

El bulling es, sin duda, uno de los mayores problemas a los que nos podemos enfrentar como centro educativo y también uno de los grandes temores de los padres.

Uno de los últimos estudios a los que hemos tenido acceso realizado por Macmillan Education, señala que 1 de cada 10 alumnos de Primaria sufrió acoso escolar en 2020, siendo tercero el curso más castigado.

En nuestro centro ponemos especial cuidado y atención para que los casos de acoso sean inexistentes y creemos que una buena educación en valores, donde se explica la importancia de la empatía y la igualdad es fundamental.

Aun así, somos conscientes que esto no siempre es suficiente. De ahí que tengamos nuestro propio código de actuación para prevenir el bulling en las aulas.

Estrategias para evitar casos de bulling en el centro escolar

El primer paso para tratar de evitar los casos de bulling en las aulas es la información y la prevención.

Respecto al primer punto, inculcar valores como la tolerancia, el respecto, la igualdad, el trabajo en equipo, y sobre todo la empatía resultan claves. Que los niños puedan “verse en los zapatos del otro”, les facilitará saber cómo se siente un compañero o compañera frente al maltrato, y esto es muy importante a la hora de poder evitar el acoso, porque ningún niño va a querer enfrentarse a un maltratador.

Además de esto, también tenemos una serie de pautas que aplicamos para prevenir el acoso en nuestras aulas. Algunas de ellas son:

1.- Estar atento y prestar atención a los cambios.

Por normal general, el bulling no se produce en presencia de los profesores. Por eso es muy importante que el profesorado esté siempre alerta y con los cinco sentidos bien despiertos, para detectar posibles anomalías. Los niños que están sufriendo casos de acoso escolar en las aulas suelen mostrar cambios de actitud en clase, empeoran en sus estudios…

También es importante prestar especial atención al entorno del colegio, no solo a las aulas. ¿Aparecen pintadas en los baños? ¿Aislan a un niño o niña en el patio? Cualquier signo de alerta hay analizarlo para saber si el alumno está siendo víctima de malos tratos por parte de sus compañeros.

2.- Escuchar

Este punto es clave. Muchas veces, sobre todo hace años, los niños que finalmente se decidían a contar a sus profesores los que pasaba en clase, nadie les hacía caso. Se miraba para otro lado y se decía aquello de “son cosas de niños”. Pues bien, ese “son cosas de niños”, no es una respuesta que nosotros demos alegremente ante estos casos. Si uno de nuestros alumnos habla con cualquiera de nuestros docentes y le explica lo que está pasando, una comisión de investigación interna del colegio se pondrá con el caso, para saber si es o no cierta la acusación. Y hasta entonces prestaremos especial atención a todo lo que rodea tanto al niño, como al supuesto acosador.

3.- Comunicación escuela familia

La comunicación entre la escuela y la familia es una vez más una clave para prevenir el bulling. También para prevenir el acoso. Cualquier mínimo cambio en vuestro hijo o cualquier mínima duda que podáis tener sobre si está siendo víctima o no de bulling, por favor, comunicadla al centro educativo. Trabajaremos de forma conjunta para frenar la situación y reconducirla cuanto antes.

Sin duda, el bulling es una lacra, y erradicarla está en mano de todos.